Los que no salen por televisión... No existen.
Por eso, grandes actores, que trabajan a diario, en teatros interpretando buenas obras, son auténticos desconocidos. Este fue el caso de Martí Galindo (nacido el 21/5/1937), que, después de toda una vida dedicada al teatro, se hizo “famoso” por sus cortas intervenciones, como colaborador en el programa “Crónicas Marcianas” de Javier Sardá, por lo que recibió el TP de Oro 1997, al Personaje ¡“Revelación”!.
Desde hace pocos años, esta frase se podría aplicar a cualquier gremio pero en lugar de “televisión” sería:
Si no apareces en Google... No existes.
Hace poco que el padre de un piloto (que tiene facilidad para escribir y navegar por internet) me decía que intentaba estar alejado de las Redes Sociales. Y le respondí,
que yo también he hecho todo lo posible para mantenerme al margen de las redes sociales pero que, tarde o temprano, llega un momento, que no puedes “frenar” la evolución y, o la sigues, o, además de desfasarte, eres un bicho raro de cara a los demás.
Como cuando nos negábamos, a mediados de los noventa, a tener un teléfono móvil., a estar siempre localizables, a depender de una batería cuya autonomía era de 24 horas, y que después de probarlo, en la época que regalaban móviles hasta comprando un paquete de galletas, ahora ya no podríamos vivir sin él.
Con las redes sociales ha pasado lo mismo.
En “nuestro caso” la mayoría de pilotos de motociclismo tienen su web, blogspot, Facebook o Twiter donde informan a sus seguidores de su pasado, presente y futuro próximo, incluso los pilotos de Minimotos o Promovelocitat tienen su propio “espacio” en internet para promocionarse. Es curioso ver un Curriculum de un piloto de 6 años, en su web. ¿con seis años y ya tienes pasado? Evidentemente, son sus padres los que lo escriben y hay algunos que se remontan a "la primera carrera":
"En mi "primera carrera" había 40 millones de participantes (¡Menuda parrilla!) y, aunque no salí de los primeros, gracias a mis dotes, conseguí llegar en primera posición. Inmediatamente me pusieron en un "húmedo Box" donde me dejaron descansar durante 9 meses, y cuando el "taller" se me quedó pequeño, un desconocido me sacó por las orejas..."
A veces la "pasión" y la imaginación de los padres... es infinita.
Yo también estuve alejado de las redes sociales, hasta que mi esposa hace un año hizo un curso de informática, (no porque quisiera sino para no ser considerada un bicho raro) y en el temario incluía crear un correo electrónico con hotmail y una cuenta en facebook con su nombre.
Como “lo que no gusta” no le sacas utilidad, al poco tiempo se cansó de mirar el correo y su facebook y lo dejó "en mis manos".
A través de su registro en Facebook he podido entrar en la cuenta de pilotos, saber su curriculum, descargarme sus fotografías, hacerles un video, escribir un artículo de su trayectoria, etc, y cada vez que les mando un mensaje o comentario, al final, firmo con mi nombre porque a ellos les llega con el nombre de mi esposa. Como cada vez lo uso más, y ya doy por hecho que saben que soy yo, a veces me olvido de por el "J.E.", al final, y me sigo llevando sorpresas de personas que cuando acaban de responderme se despiden con un:
"Gracias, Encarni, nos vemos en las carreras!"
y tengo que recordarles que el que escribe soy yo, que no vayan a pensar que estoy cometiendo "usurpación de imagen", como ocurrió durante la década de los 70’s, con la famosa “sexóloga” radiofónica, Elena Francis, que después de responder a miles de consultas de amas de casa, resultó que no existía y era un equipo de periodista que hacían un guión con preguntas y respuestas inventadas.
No es conveniente “rechazar” la evolución, y recomiendo a todos los padres de pilotos de Minimotos o Promovelocitat, que abran una cuenta en facebook o tengan su propio blog para "mostrar al mundo" los avances de sus hijos.
Yo era de los que en 1992 usaba en la oficina el editor de texto wordperfect 5.0. (con el sistema operativo MS-Dos:/) resistiéndome a pasar a la versión 5.1, cuando empezaron a hablarme de un nuevo sistema operativo llamado... ¿cómo era? Ah si, ahora me acuerdo... Windows’90. Que en mi infinita sabiduría dije:
¡Este sistema va a durar menos que el video-Beta!
No os preocupéis... si algún día compro “acciones en Bolsa” ya os avisaré para que no compréis.
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